martes, 27 de julio de 2010

No hay actos públicos

Parece que mi espera aún no ha terminado. Esta mañana han salido las convocatorias de actos públicos para asignar destino a los que hemos sacado plaza, pero a los de mi especialidad nos han citado para septiembre.

¿Qué implica esto? Pues varias cosas:

- que hasta septiembre no sé dónde trabajo, ni si tendré vacante o sustitución (aunque siendo la octava espero que sea vacante).
- que dado que las citaciones son a partir del día 3 (viernes), lo mismo aprovechan para ahorrarse unos cuantos euros así a lo tonto, y más si ya que están lo dejan para el lunes 6. (Parecerá una tontería, pero 5 días x 75 personas que han sacado plaza = muchos €€€. Y eso sólo en Matemáticas).
- que a lo mejor de aquí a septiembre se genera alguna vacante más de las que tengan ahora (me resisto a creer que no hay absolutamente ninguna), y siempre es mejor tener más oferta.
- que no sé cuándo me voy a enterar de a qué sistema sanitario pertenezco, y eso, cuando estás pensando quedarte embarazada, tiene "cierta" importancia.
- que los papeles los tengo que entregar sí o sí. ¿Será una estratagema para ver si a algún despistado se le olvida y así tienen que dar menos plazas?

En fin, al menos no tengo que preparar la próxima oposición y puedo mandar los apuntes al trastero...

lunes, 26 de julio de 2010

¡¡Soy la octava!!


¡Por fin han salido los listados definitivos de la gente que ha sacado plaza! Después de estar esperando todo el viernes porque habían metido la pata con los baremos definitivos (y menos mal que el fin de semana estuve fuera, que si no...) y de haberme pasado la mañana de hoy recargando la página de Educación, a eso de las tres de la tarde han pensado que ya era buena hora para colgar los listados en internet.

¡¡Y SOY LA OCTAVA!!

Estoy que no quepo en mí de gozo, pero la espera aún no ha terminado: ahora tienen que sacar los institutos que ofertan para hacer las prácticas. Muy mal se me tiene que dar para que me toque uno que me venga mal del todo...

martes, 20 de julio de 2010

¿Y ahora qué?

Eso es lo que llevo un par de días preguntándome, ¿ahora que hago con mi tiempo libre?

Después de varios años con la puñetera oposición me encuentro con que no tengo nada que hacer en toda la tarde (vale, ahora ni en toda la mañana tampoco porque estoy de vacaciones), y no tengo claro cómo llenar todo este tiempo. Además, he perdido bastante contacto con la gente que me importa y con el mundo real, tengo la sensación de no tener temas de conversación, me encuentro sin objetivos ni metas, y tampoco es que el calor que está haciendo ayude mucho precisamente...

El otro día me hice una lista de cosas que quiero hacer este verano. En general quiero poner en orden mi vida: organizar la ropa del armario, bajar los apuntes de la oposición al trastero, hacer el álbum de fotos de la boda (que hace ya más de un año de ella), quitarme alguno de los kilos que he cogido por estar todo el día sentada, leer todo lo que no he leído este curso,... Pero a la hora de la verdad me quedo todo el día tirada en el sofá mirando la página del igoogle a ver si alguien me ha escrito un mail. Supongo que sigo agotada, no me da la cabeza ni para leer, ni siquiera para jugar con mis sims,...

lunes, 19 de julio de 2010

Oposición 3: las notas

El viernes pasado por fin salieron las notas, ¡¡y aprobé!!

Hice tiempo como pude toda la mañana y por fin llegó la hora de ir a ver las notas. Por algún extraño motivo, en la capital de este país hay que ir a ver las notas al instituto en el que te examinaste, mientras que en otras comunidades las publican por internet.
Pero por fin llegué al instituto y traté de acercarme al tablón, cosa que no es tan fácil cuando mides metro y medio. Total: ¡¡6'885!! Aunque parezca una nota un poco baja, lo cierto es que era la segunda nota más alta de los tribunales que había en ese instituto. En otras especialidades hay notas más altas (parece que la nota de corte de inglés va a estar sobre el siete y medio), pero en Matemáticas casi basta con aprobar el examen, apenas hay aprobados sin plaza.
Total, que me quedé como alelada, no podía reaccionar. Y encima los compañeros de la academia que había por ahí habían suspendido, así que no sabía muy bien cómo actuar.
Me pasé toda la tarde colgada al teléfono, haciendo y recibiendo llamadas. Tanto, que hasta acabé la batería del teléfono inalámbrico.

¡Me siento tan feliz!

Oposición 2: el examen oral

Diez días después del examen escrito me tocaba hacer el examen oral. Este es (con pocas modificaciones) el mail que escribí a algunos amigos para contarles cómo había ido.

Dado que me había levantado a las cinco y media de la mañana porque nos habían citado a las ocho (perdiéndome y todo estaba en la puerta del insti a las siete y diez, pero los misterios de la M40 son inescrutables así que no quería correr riesgos), y que no me tocó exponer hasta la una de la tarde, me parece que los nervios se me derritieron en el aula que nos prestaron para esperar.
Cometí el error de llevar ropa sin bolsillos, y como llevaba unos dominós, el agua, los portatizas,... entre en el aula haciendo malabares y diciendo "es que yo sin mi bata no me apaño".
La programación de memorieta, como tiene que ser, y creo que no se me olvidó nada importante (de hecho juraría que el paso que hice a la unidad fue del estilo "creo que no me he olvidado nada, así que paso a la unidad").
La unidad mejor, moviéndome de un lado a otro y enseñándoles cositas (los dominós, los círculos de fracciones, las fotocopias con textos,..., hasta diría que a la chica jovencita casi se le escapó una risita). ¡Hasta parecía que les interesara lo que decía!
La primera de las preguntas fácil: "¿cómo te comunicas con la chica sorda?" "vaya, ¿no lo he dicho? Pues se me habra olvidado, tiene un audífono, en la programación escrita lo pone".
La segunda más difícil: "¿qué entiendes por aprendizaje significativo en matemáticas?". En esta me hicieron dudar un pelín, pero yo les expliqué lo que yo entendía (avanzar poco a poco, repasando lo anterior y adelantando algunas cosas sencillas antes de estudiarlas en profundidad) y acabé con "lo mismo es que eso no se llama aprendizaje significativo, sino aprendizaje circular o cualquier cosa así, pero es lo que yo entiendo por aprendizaje significativo".
La última una duda sobre la puntuación que me ofrecí a buscarles en la programación escrita.
Para terminar preguntas personales: "¿de verdad has tenido 18 alumnos?¿dónde has estado?". Así que les expliqué que lo único que no era verdad del contexto era lo del chico sordo (perdón, con discapacidad auditiva), que el que yo tenía este curso era disléxico, pero que como pasaba todas las horas con su profe específica y yo no conocía la problemática particular, decidí poner el alumno sordo que tuve el año anterior, que sí que estaba en clase.
Al salir se me cayó la botella de agua y me ayudaron a cogerla, así que salí entre muchos "muchas gracias" y "es que yo sin bata...".
En definitiva, que no sé si lo he hecho genial o he metido la pata hasta el fondo por ir "demasiado suelta". Ahora toca esperar casi dos semanas a que salgan las notas.

Así que me fui un par de días a casa de mis padres, que en ciudades más pequeñas se va mejor de rebajas. Me pasé varios días recordando y reviviendo la exposición oral, pero al final los días pasaron y salieron las notas...

domingo, 18 de julio de 2010

Oposición 1: el examen escrito

(NOTA: texto escrito después del examen escrito y poco modificado desde entonces. Es que no me he acordado mucho del blog últimamente)

¡Síiiii! ¡No me lo puedo creer! ¡Salió el 45! ¡Mi tema favorito entre los favoritos!
Lo había hecho en el último simulacro de la academia, prácticamente igual que el día del examen escrito en la oposición (vale, cambié un apartado de orden, pero en la opo me acordé de cómo se demostraba una cosa que en el simulacro no hice), y el profe me puso un 8'25. No me dio tiempo a escribir nada de áreas y volúmenes (era el tema de poliedros, en concreto de sólidos platónicos y arquimedianos), pero en la academia tampoco. Ahora sólo espero que a los del tribunal les guste también... De todas formas, el tema este también tiene la ventaja de que en general no gusta mucho, así que con suerte no lo habrá cogido mucha gente y les entretendrá más. O eso espero jeje.
Ahora, pasé un mal rato cuando nos dijeron los temas... Llega el profe con su folio con los resultados del sorteo, y empieza a escribir en la pizarra. El 22 (¡ay, madre! ¡que este no me lo sé!), el 23 (¡este tampoco!), el 27 (este no me gusta y es difícil y muy puntilloso, pero si no queda otro remedio...), el 35 (¿el 35? ese ni me lo he leído en las tres veces que he preparado esto, ¡es infumable!), y el 45 (¿el 45? ¿he dicho el 45? ¡no puede ser, creo que me voy a echar a llorar de la emoción!!!!). Vamos, que me costó un par de minutos reponerme y contener las ganar de ponerme a gritar. Pero, claro, si me ponía a llorar en primera fila se iba a notar mucho...
Los problemas los hicimos también ese mismo día. No me salieron tan bien, eso sí, pero es que era difícil que me salieran mejor que el tema.El primero era de Geometría, de esos retorcidos que incluso después de ver cómo lo resuelven un par de academias sigo sin verle el sentido. El segundo era de números complejos (otro de mis temas favoritos) y tenía tres apartados: dos me salieron perfectos y el tercero no lo supe hacer. El tercero perfecto, lo habíamos hecho en la academia y, si bien lo hice primero mal, al repasar vi el error, rompí la hoja y lo volví a hacer, esta vez bien (y luego comprobado con los apuntes de la academia). El cuarto dudoso: los resultados me dieron bien pero se le pueden poner pegas en cuanto al rigor.
Horrorosos los tiempos, eso sí: nos citaron a las nueve y a las nueve y cuarto, cuando nos tenían ya sentados, nos dicen que hasta las diez no vamos a empezar (tres cuartos de hora mirando al techo antes de un examen. Vamos, de lo mejorcito para el ataque de histeria). Acabamos el tema a las doce y cuarto, y los problemas no fueron ¡hasta las cuatro!
Yo entiendo que es para evitar que la gente se presente en dos comunidades pero cuando volví a casa por la tarde, que encima se me jorobó el metro, estaba tan agotada que a las diez me quedé dormida en el sofá.